Se les conoce como Adelitas a las mujeres guerrilleras que participaron, al pie del cañón, en la revolución mexicana.
Cargaban por un lado el rifle, por el otro la canasta con comida y su hijo cargando con un reboso en la espalda, inspiración de corridos, leyendas, historias, películas.
Las Adelitas o soldaderas acompañaban a su hombre permanentemente y no importaba a dónde. Los acompañaban como una segunda línea de batalla para ayudarlo, impulsarlo y servirle como una enfermera, levantando con sus gritos y exclamaciones el ánimo de los combatientes. La soldaderas o Adelitas las compañeras inseparable.Y lo mas admirable en ellas fue que fueron capaces de arriesgar todo por amor.
Mujeres procedentes de las clases sociales medias o altas eran intelectuales y se dedicaban a la militancia, habia enfermeras, despachadoras de trenes, correos, espías, enlaces, abastecedoras de armas, telegrafistas, propagandistas de las ideas revolucionarias, combatientes y coronelas.
Los historiadores dicen ellas fueron parte fundamental de la revolución mexicana.
Mujeres valientes que por amor a sus esposos, a sus hijos, a su pueblo, se levantaron y decidieron ir a servirles y a pelear en la batalla.
En la Biblia tambien hay Adelitas, Las Adelitas de Dios, mujeres valientes que por amor a Dios y a su nación, no les importó arriesgar su vida.
Una de ellas fue Débora, encontramos su historia en Jueces 4
En ese tiempo Israel estaba siendo oprimido por el rey de Canaan.
Pero ellos clamaron y en aquel tiempo Israel era gobernado por una mujer llamada Débora,la profetisa quien era la juez de Israel, ya que en ese entonces el pueblo era gobernado por caudillos que juzgaban de ahí el nombre de este libro, jueces.
Asi como en aquel tiempo el pueblo de Dios clamó, nosotros estamos viviendo tiempos de clamor, hay un clamor por avivamiento por que el reino de Dios se establezca en cada corazón y su salvación y su gloria inhunden toda la tierra.
Pero antes es necesaria una revolución. Una revolución espiritual, de principios de valores.
En nuestra sociedad hay un caos, perdida de valores, esta sociedad necesita los principio de Dios.
Así como pasó en los tiempos de Débora que había un clamor, asi nosotros estamos viviendo un tiempo de clamor
Jueces 5:7
Las aldeas quedaron abandonadas en Israel, habían decaído,
Cargaban por un lado el rifle, por el otro la canasta con comida y su hijo cargando con un reboso en la espalda, inspiración de corridos, leyendas, historias, películas.
Las Adelitas o soldaderas acompañaban a su hombre permanentemente y no importaba a dónde. Los acompañaban como una segunda línea de batalla para ayudarlo, impulsarlo y servirle como una enfermera, levantando con sus gritos y exclamaciones el ánimo de los combatientes. La soldaderas o Adelitas las compañeras inseparable.Y lo mas admirable en ellas fue que fueron capaces de arriesgar todo por amor.
Mujeres procedentes de las clases sociales medias o altas eran intelectuales y se dedicaban a la militancia, habia enfermeras, despachadoras de trenes, correos, espías, enlaces, abastecedoras de armas, telegrafistas, propagandistas de las ideas revolucionarias, combatientes y coronelas.
Los historiadores dicen ellas fueron parte fundamental de la revolución mexicana.
Mujeres valientes que por amor a sus esposos, a sus hijos, a su pueblo, se levantaron y decidieron ir a servirles y a pelear en la batalla.
En la Biblia tambien hay Adelitas, Las Adelitas de Dios, mujeres valientes que por amor a Dios y a su nación, no les importó arriesgar su vida.
Una de ellas fue Débora, encontramos su historia en Jueces 4
En ese tiempo Israel estaba siendo oprimido por el rey de Canaan.
Pero ellos clamaron y en aquel tiempo Israel era gobernado por una mujer llamada Débora,la profetisa quien era la juez de Israel, ya que en ese entonces el pueblo era gobernado por caudillos que juzgaban de ahí el nombre de este libro, jueces.
Asi como en aquel tiempo el pueblo de Dios clamó, nosotros estamos viviendo tiempos de clamor, hay un clamor por avivamiento por que el reino de Dios se establezca en cada corazón y su salvación y su gloria inhunden toda la tierra.
Pero antes es necesaria una revolución. Una revolución espiritual, de principios de valores.
En nuestra sociedad hay un caos, perdida de valores, esta sociedad necesita los principio de Dios.
Así como pasó en los tiempos de Débora que había un clamor, asi nosotros estamos viviendo un tiempo de clamor
Jueces 5:7
Las aldeas quedaron abandonadas en Israel, habían decaído,
Hasta que yo Débora me levanté,
Me levanté como madre en Israel.
Débora una mujer valiente que se levantó como una madre de Israel
Dios esta levantando un ejército que revolucionará la historia de este planeta Dios esta llamando a una revolución, se buscan adelitas que se levanten, mujeres valientes que decidan ser parte de esta revolución de Dios, porque son parte fundamental de este llamado.
Débora fue una adelita que tomó la desición y por amor a su nación, repondió al llamado.
Jueces 4:6-7 Y ella envió a llamar a Barac hijo de Abinoam, de Cedes de Neftalí, y le dijo: ¿No te ha mandado Jehová Dios de Israel, diciendo: Ve, junta a tu gente en el monte de Tabor, y toma contigo diez mil hombres de la tribu de Neftalí y de la tribu de Zabulón; y yo atraeré hacia ti al arroyo de Cisón a Sísara, capitán del ejército de Jabín, con sus carros y su ejército, y lo entregaré en tus manos?
14Entonces Débora dijo a Barac: Levántate, porque este es el día en que Jehová ha entregado a Sísara en tus manos. ¿No ha salido Jehová delante de ti? Y Barac descendió del monte de Tabor, y diez mil hombres en pos de él.
Débora mando llamar a Barac y le dio una promesa de Dios.En dos ocasiones le recordó la promesa.
Mujeres que se levanten como madres para esta generación a la cual Dios les ha dado su promesa, tu y yo, así como Débora debemos declarar esas promesas de Dios a esta generación, declarar para ellos bendición.
Mamás que bendigan a sus hijos, que declaren las bendiciones de Dios para ellos, que no dejen que les gane el enojo y salgan de sus bocas palabras de maldición sino que de nuestra boca siempre salga bendición.
Si eres líder que para tus jóvenes siempre salgan palabras de aliento, declárales bendición.
Ayúdales a alcanzar esas promesas no los dejes solos en la línea de batalla Débora al igual que las adelitas de la revolución mexicana no los dejaron solo sino que pelearon a su lado. Nuestra batalla es espiritual todos los días peleamos la batalla de la fe, peleemos la batalla juntos, motivándoles a cumplir los planes de Dios en su vida, dándoles consejo, predicándoles la palabra de Dios con nuestro ejemplo, sirviéndoles en la línea de batalla.
Las Adelitas arriesgaron todo por amor, siguieron a sus hombres hasta el final.
El núcleo de la sociedad es la familia y para dar a luz una nueva generación sana, es necesario un matrimonio sano que sea unido.
La mujer era la costilla de Adán, nuestro destino siempre fue el estar unidos, pero Dios nos sacó de allí para que ahora por amor decidamos volver a ser uno solo.
Decide apoyar a tu esposo, decide ser como una Adelita la compañera fiel, que aunque las cosas se pusieron difíciles decidieron arriesgarse junto con ellos y no iban a la guerra quejándose sino dándoles animo, los historiadores dice que las Adelitas no se involucraron en la revolución por que estuvieran muy convencidas de las ideas de la guerra sino principalmente por amor, por amor a sus hombres.
Hoy se buscan Adelitas que por amor decidan ir al frente de la batalla y ser parte de esta revolución de Dios.
14Entonces Débora dijo a Barac: Levántate, porque este es el día en que Jehová ha entregado a Sísara en tus manos. ¿No ha salido Jehová delante de ti? Y Barac descendió del monte de Tabor, y diez mil hombres en pos de él.
Débora mando llamar a Barac y le dio una promesa de Dios.En dos ocasiones le recordó la promesa.
Mujeres que se levanten como madres para esta generación a la cual Dios les ha dado su promesa, tu y yo, así como Débora debemos declarar esas promesas de Dios a esta generación, declarar para ellos bendición.
Mamás que bendigan a sus hijos, que declaren las bendiciones de Dios para ellos, que no dejen que les gane el enojo y salgan de sus bocas palabras de maldición sino que de nuestra boca siempre salga bendición.
Si eres líder que para tus jóvenes siempre salgan palabras de aliento, declárales bendición.
Ayúdales a alcanzar esas promesas no los dejes solos en la línea de batalla Débora al igual que las adelitas de la revolución mexicana no los dejaron solo sino que pelearon a su lado. Nuestra batalla es espiritual todos los días peleamos la batalla de la fe, peleemos la batalla juntos, motivándoles a cumplir los planes de Dios en su vida, dándoles consejo, predicándoles la palabra de Dios con nuestro ejemplo, sirviéndoles en la línea de batalla.
Las Adelitas arriesgaron todo por amor, siguieron a sus hombres hasta el final.
El núcleo de la sociedad es la familia y para dar a luz una nueva generación sana, es necesario un matrimonio sano que sea unido.
La mujer era la costilla de Adán, nuestro destino siempre fue el estar unidos, pero Dios nos sacó de allí para que ahora por amor decidamos volver a ser uno solo.
Decide apoyar a tu esposo, decide ser como una Adelita la compañera fiel, que aunque las cosas se pusieron difíciles decidieron arriesgarse junto con ellos y no iban a la guerra quejándose sino dándoles animo, los historiadores dice que las Adelitas no se involucraron en la revolución por que estuvieran muy convencidas de las ideas de la guerra sino principalmente por amor, por amor a sus hombres.
Hoy se buscan Adelitas que por amor decidan ir al frente de la batalla y ser parte de esta revolución de Dios.